Muchos quizá se consideran amantes a las motocicletas o sienten un cariño especial por los animales; en el caso de esta mujer, tiene ambas, tomó la decisión de conducir su moto por el mundo acompañada de su canino. Increíble historia.
Conozcan la historia de Stone, una mujer de origen canadiense, ella sintió una afinidad especial con las motocicletas, comenzó a dar sus primeras aceleraciones en las calles de Liberia, al sur de África Occidental, hace un poco más de 10 años vivía allí con su pareja Greg, donde expone que recibió enseñanza por parte de él, pero añadiendo algo que causa gracia, “No fue muy paciente conmigo”.
Cuando ya se sintió cómoda con la conducción, decidieron emprender correrías, realizando un viaje único desde América del Norte hasta América del Sur, nada mal para comenzar a aventurarse; en total fueron ocho meses de trayectos maravillosos y paisajes increíbles. Para retornar a su hogar, decidieron quedarse en Guatemala, fue ahí donde apareció su nuevo amigo fiel, su actual compañero de andanzas, su mascota Moxie.
Stone cuenta que desde que conoció a su perro, menciona que “ella me eligió al 100%”, desde ahí la conexión comenzó a ser fuerte y su alianza la llevó a plantearse nuevos retos sin dejar de lado a Moxie.
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La visión de Stone y Greg era seguir viajando, conociendo y aprendiendo de las nuevas culturas, pero no podían hacerlo solos ya, con ellos estaba Moxie, la nueva aventurera; uno de los detalles es que Stone no quería poner un remolque ya que por fin se sentía bien conduciendo motocicleta y el instalar eso cambiarían las condiciones de manejo.
Ahora bien, solo quedaba sentarse y diseñar lo que sería su nuevo vehículo, el K9 moto Cockpit, esto es un “transportín” de motocicleta para perros que se fabricaba allá mismo en Guatemala, pero no era solo eso, además cuenta con una serie de insumos de camping para mascotas, nada mal. Ahora sí que comience la verdadera aventura de humanos y canino.
"Todo el mundo siempre pregunta cuánto tiempo lleva enseñar a su perro a andar en moto", en donde responde “honestamente, le tomó a Moxie el fin de semana”. Increíble pero cierto. Agregando que “me tomó mucho más tiempo sentirme cómoda teniendo tanto peso atrás, porque nunca había viajado con un pasajero". Concluyó.
Luego, tuvieron la oportunidad de participar de eventos y actividades juntos, es así como buscaban la forma de recaudar más ingresos.
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