sin duda el humor contribuye a tener un país más feliz, más fuerte al reírse de sus propias penas, al tiempo que nutre nuestra idiosincrasia que tanto nos admiran los países vecinos. Piter Albeiro es un motociclista apasionado que partiendo desde la cotidianidad, nos acerca a través del humor a esos escenarios en los que todos nos identificamos y reímos sin parar.

¿Cómo es eso que a usted en su época en la Policía, antes de una requisa le pedían un chiste?

Cuando yo estaba en la policía, comencé a contar chistes cuando era cadete, tenía el problema que quería ser teniente de la policía, inspirar respeto, pero pues el hecho que la gente me viera contando chistes con uniforme no se prestaba mucho, siempre que trataba de imponer la ley, me pedían un chiste.

Al subir a un escenario y al tener la misión de hacer reír a todo un auditorio, ¿cómo maneja su estado anímico aún cuando el objetivo debe estar por encima de la tristeza o la preocupación?

Uno como comediante casi que termina siendo un actor, sabe que cuando uno se para en el escenario los problemas personales tiene que dejarlos a un lado, esa persona que paga una entrada por ir quiere verte feliz, dando lo mejor de sí para contribuirles a ellos en su sano esparcimiento. Ya varias veces me ha pasado, por ejemplo una vez que se enfermó mi niño y tuvieron que llevarlo en una ambulancia, él nunca se había enfermado y tenía que presentarme, me estaban anunciando. Yo tuve que dejar a un lado esa preocupación por una hora y media, dejar de pensar en mi hijo y concentrarme en la gente que estaba ahí, no es fácil pero con práctica y con tiempo se logra.

Deben pedirle en todo momento que cuente su mejor chiste, ¿uno no siempre está para chistes verdad?

Bueno yo he aprendido cuándo estoy para chiste y cuándo no, pero todo el tiempo trato de tener una cara amable, hay gente que siempre se acerca a tomarse una foto, o si uno está en una reunión quieren que uno este contando chistes todo el tiempo y es normal, uno se acostumbra, eso sí, siempre tengo un apunte. Por ejemplo cuando me dicen, “ay, usted es como serio, no parece que contara chistes”, yo les digo: “es que gratis soy tímido”.

Sexo a la carta sin duda ha sido un gran éxito en su carrera artística, ¿en qué idea está trabajando actualmente?

La obra que comenzó llamándose Sexo a la Carta luego evolucionó y se llamó La Comedia de Todos los Tiempos porque el anterior título sonaba un poco sugestivo. Estoy trabajando en un nuevo proyecto que se llama Por Primera Vez que, es como la segunda parte de este show.

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Carolina es su mano derecha, maneja las cuentas y toma las decisiones, pero aclárenos por favor, ¿ella es o no es la protagonista de sus historias en los Stand Up Comedy?

Todas las presentaciones salen de vivencias propias y anécdotas, mi esposa dice que no, que ella no es así, pero es el reflejo de la mayoría de las mujeres. Cuando me reúno con mis amigos uno suele decir por ejemplo: “Uy, no se ha dado cuenta cuando las mujeres empiezan a pelear ellas solas, uno no está diciendo y se arman unas películas…” El hecho de vivir una relación de pareja me da los argumentos para hablar de las relaciones, es más fácil para mí que he vivido ciertas situaciones hablar desde la experiencia y no por aprenderme un libreto.

Sabemos que siempre ha sido un fanático de las motos ¿Cuál fue su primera moto y qué recuerdos tiene de aquella época?

Bueno yo soy fanático de las motos desde que empecé en la Policía Nacional, mi primera moto fue una Suzuki Savage 650 que le compré a un amigo, estaba más en el taller que en mi casa, luego me compré una Shadow 600 que mandé personalizar en la época que estaba de moda el Custom, transformarlas, la hice casi como la moto del Hombre Araña.

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Yo comencé a organizar los encuentros de motos de Alto Cilindraje en Bucaramanga, desde el año 2005 hice 8 encuentros, y poco a poco me empecé a meter en la cultura Harley hasta que pude tener mi primera Harley Davidson tiempo después, fue una Be Road en el año 2008, y cuando llegué a Estados Unidos lo primero que quise hacer fue comprar mi moto, acababa de salir la Breakout en una edición especial, y esa es la moto que tengo actualmente. No la ando mucho, apenas tienes 1000 millas en 4 años, pero la adoro, es una moto muy chévere. Me gustan las motos de llanta ancha, como las mujeres santandereanas, me gustan las motos que atrás tengan un buen respaldo.

¿Qué diferencias nota a la hora de conducir moto entre EEUU y Bogotá o Bucaramanga?

La diferencia de conducir moto en Estados Unidos especialmente en Miami es un tema de cultura, no se ven muchas motos en Miami, muy pocas, aquí no es obligatorio el casco, en Estados Unidos el tema de los seguros y las demandas es muy grave, razón por la cual los carros cuando ven a un motociclista les da miedo tumbarlo o hacerle daño. Las motos por norma deben respetar los carriles, no pueden ir entre los carros y llegando de primeras al semáforo. Si uno va en la moto debe ir detrás de los carros igual, este tipo de situaciones hacen muy diferente la conducción.

¿Suele usar la moto con regularidad con qué propósito la tiene?

Cuando compré la moto la usaba todo el tiempo, luego el tema del calor, o que empezaba a llover me hizo irla dejando un poco, pero hay un grupo en Miami los jueves que se reúne en un Café Bar llamado Café 27, es como a 20 minutos de mi casa y es bastante interesante  porque el ambiente del motociclismo en Estados Unidos es una cultura muy chévere. Sueño con ir a un encuentro de motos en Daytona, no he podido aún por tema de agenda, me dicen que es lo más emblemático que hay, quiero ir a Milwaukee a conocer la fábrica de Harley Davidson.

¿En moto va sólo, con Carolina o con “Olguita”?

Normalmente cuando voy en la moto tengo que ir solo porque no es muy cómodo el asiento trasero, es más bien pequeñito, no se presta mucho para viajes largos, tengo que hacerle algunas adaptaciones. Cuando la compré no había mucho accesorio para ese modelo, pero la idea es poder compartir con mi niño que dice que le gustan mucho las motos, con mi esposa, pero con Olguita nada que ver.

Tiene un Lamborghini, una Harley, un hermoso Bote “Caroline”, ¿qué otros jugueticos le hacen falta?

Los motociclistas somos personas que por naturaleza nos gusta la adrenalina, la libertad, el aire, el ser guerreros, el tener un jean para dos o tres días y un par de camisetas para irse uno de paseo porque no puede llevar tanta cosa. Y bueno, estoy ahorrando para un botecito más grande, después pienso cómo pagarlo porque debo todavía de eso…

Desde su experiencia como motociclista, un consejo útil para todos los moteros de Colombia

Siempre ser consientes y pensar que la motocicleta es un medio de transporte riesgoso, uno nunca se puede confiar, yo llevo muchos años montando en moto y nunca he tenido un accidente porque siempre manejo a la defensiva, sé que un golpe o una caída la voy a recibir yo, pienso en mi familia, veo a la moto como una distracción, como un hobie, solo corría en los ¼ de milla pero por la seguridad que se tenía en los encuentros, en la calle jamás. Cuando se tiene una moto como la Breakout, uno quiere que la vean, la conozcan, si uno va rápido no lo alcanzan a ver. Cuando se suban en una moto piensen en sus familias, en cuanta gente puede sufrir cuando les pase algo. Manejen con responsabilidad y acatando las normas de tránsito.

Finalmente un saludo para todos los seguidores de la Revista Publimotos.

Un saludo especial a los seguidores de Publimotos, aquí en Miami a la orden, cualquier cosa que les ofrezca, ¡consíganla!

 Periodista: Antonio José Cogollo Rodríguez